Mi hermana dice que hago ruiditos con la boca. Me lo hizo notar hace apenas unos días. Así supe atrapando uno de ellos, que más que un murmullo se trata de un sonido gutural, como si lo oral no quisiera tomar forma y eligiera quedarse en eso, en una especie de gruñido.
A veces es un estado de ausencia- de eso hace tiempo que soy consciente- las imágenes surgen reveladoras, atrayentes, y las dejo escapar tal como aparecen, liberándolas de un posible nacimiento que podría no ser festivo.
Le digo que escribo, a mi hermana, le digo que en una u otra forma, es así como ahora escribo y es cierto, concibo historias que guardo a buen recaudo. Vienen, van, se pasean ante esa otra mirada, exhibiendo sus galas, contradictoriamente simples, entre gruñidos y ausencias. Son solo mías, pero en esto miento, es la imposibilidad de conjugar, de excretar…lo que hacen que nunca sean.
A veces es un estado de ausencia- de eso hace tiempo que soy consciente- las imágenes surgen reveladoras, atrayentes, y las dejo escapar tal como aparecen, liberándolas de un posible nacimiento que podría no ser festivo.
Le digo que escribo, a mi hermana, le digo que en una u otra forma, es así como ahora escribo y es cierto, concibo historias que guardo a buen recaudo. Vienen, van, se pasean ante esa otra mirada, exhibiendo sus galas, contradictoriamente simples, entre gruñidos y ausencias. Son solo mías, pero en esto miento, es la imposibilidad de conjugar, de excretar…lo que hacen que nunca sean.
Anuchi siento lo que sientes...pero todavia eres una ninfa, una cria de libelula que solo sale de su huevo para comer, explorar mundo, oler, tocar...no te preocupes que el proceso es largo, que todavia te faltan mudas, ¿sabias que pueden tardar cinco años y 15 mudas en abrir su espalda para dejar el camino libre a un ser distinto?; un insecto de largo abdomen, desproporcionados ojos, alas replegadas y apariencia viscosa. Para salir de la funda inerte y agarrarse con sus ganchudas patas a cualquier rama, extenderse y ventilar sus alas para lanzarse al vuelo cargado de dudas...No desistas que, quien sabe cuantas mudas te faltan, pero estas alli, en el proceso para despues lanzarte al vuelo.
ResponderEliminarMuchos besos y un monton de suerte, y escribe!!!! no me seas tonta ;)
Sigue en lie mi invitacion para entrar a Camagua... definitivamente soy tu fan
ResponderEliminarSaludos
Carlos /mirache
La hermosura con la que nos escribes hoy, a pesar del mensaje que guarda, es la prueba de que resistes las tempestades de ausencias y desganas.
ResponderEliminarNo te equivoques. Ellas, las ausencias y las desganas no son sino alimento también de la hermosura en las palabras y en los sentimientos.
No te equivoques. Lo que guardas para ti hoy estallará mañana como fuegos de artificio para otros ojos, que admiradores del color y del calor de lo humano que desprendes, soltarán largos "ohhhhh" como aclamándote.
No te equivoques. La vida es también pobreza, que en tu caso es sólo aparente....afortunadamente para mi, para ti, para nosotros.
Tú eres rica, Ana.
Ya abriremos el cofre...
Con mucha alegría de verte te dejo un abrazo de esos de calor, a pesar del idem del momento.
MUAKKKSSSS! Preciosa reina!
Äfrica
Aish... venia decirte que te echaba de menos y te veo aquí, bueno, te entreveo, y... joder, pues si, estoy llorando... buena la has hecho Aniuska...
ResponderEliminarOye, dime salta y salto!!!
Te llamo? te escribo? te canto? te bailo por buleria?????
Que te quiero, mucho, que me encantaria contarte cosas que me suceden, que daria mis rizos porque estuvieras bien, ¿quieres que me rape? aish...
Te huelo, desde aquí te huelo Aniuska de las tejas naranjas... y te quiero tanto que te abrazaria y no te soltaria jamás.
Un beso enorme, grande, sonoro, de los solo te doy a ti.
Y que bien escribe la leona, cagontó, que cosas dice... en serio, mañana o dentro de 30 años, pero un café en Atocha nos debemos las tres.
ResponderEliminarUn besazo pa cada una, MUACKS!!!
Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero,
ResponderEliminarte quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, y te requiero.
Eres única, mi Aniuska...
ResponderEliminarTe debo un café, recuerda, con v o con b, jeje.
MUAS!
En mi caso es el agobiante calor el que me impide describir las historias que hay en mi cabeza o incluso cantar lo que hay en mi corazón, me tiene sin cobertura de ideas.
ResponderEliminarMe alegra tanto verte y aunque tu digas lo contrario, me alegra verte en plena forma creativa
Me encantan tus historias crudas, sin aditivos ni conservantes, al natural y conservadas en su propio jugo. A veces los ruidos leves pueden convertirse en gritos bien marcados. Escribe aunque sea en tu cabeza.
ResponderEliminarUn abrazo
hola guapa sólo una cosa: sigue escribiendo, sigue escribiendo, sigue escribiendo... me has pillado no?
ResponderEliminarun besote
-Jordi-
De la idea al verbo, va un trecho que a veces resulta inabarcable. Es cierto.
ResponderEliminarPd.- Dilatas tanto las entradas, que hacía un montón que no te visitaba creyéndote de vacaciones.
siempre haces ruiditos con la garganta cada vez que comes, no se si es porque esta deliciosa o porque estas escriiendo algo en tu mente, si es asi deberias plasmarlo y no quedartelo para ti, haz un esfuerzo y ya sabes esos ruiditos se convertiran en poesia
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